Kaity Johnson, Asociada Médica

Una asociada médica continúa la tradición familiar, enriquecida con WellMed

Kaity Johnson inició su trayectoria profesional como asociada médica, cumpliendo así un deseo de toda la vida. Además, seguía una tradición familiar iniciada por su abuelo, el Dr. Jim Johnson, Osteópata, establecida hace más de 60 años, y en la misma clínica. Cuando su abuelo abrió sus puertas en 1961, la clínica, que ahora es WellMed at Hampton, en Dallas, era un pequeño consultorio familiar.

Kaity inició su trayectoria profesional en 2018 y ahora es la profesional clínica avanzada principal. Trabaja junto a su padre, el médico osteópata Steven Johnson, que empezó su trayectoria profesional como médico en el Ejército y comenzó a trabajar en la clínica hace 36 años. El mayor de los Johnson se jubiló en 2011, ahora tiene noventa y tantos años y se mantiene activo y ágil.

“Atiendo a personas de 50 años a las que trajo al mundo mi abuelo”, dijo Kaity. “Veo a tres y cuatro generaciones de familiares, así que todos los días me preguntan por mi abuelo. Tanto él como mi padre han estado muy comprometidos con la comunidad a lo largo de los años y han dejado una profunda huella en la vida de la gente. Es por eso que sigo oyendo con frecuencia historias sobre el impacto que cada uno de ellos tuvo en los familiares de mis pacientes.

Siguiendo la tradición familiar, Kaity está dejando huella a su manera. “Cuando me hice asociada médica, mi abuelo fue mi primer paciente. Nos sentamos a platicar y me dio consejos sobre cómo escuchar a los pacientes. Fue algo muy especial”, comentó.

El amor por la Medicina y por ayudar a la gente tiene raíces profundas y forma parte de su vida. Kaity dice que siempre supo que quería dedicarse a la Medicina y estar en la misma clínica en la que sigue trabajando su padre. “Es mi pasión. Cuando tenía cuatro años, mi madre me llevaba a la clínica y yo entraba a la sala de espera y les preguntaba a los pacientes qué les pasaba y luego les ponía curitas (tiritas)”, dice riéndose. “Algunas de esas personas, que ahora tienen unos 70 u 80 años, son mis pacientes y se acuerdan de eso. Ellos forman parte de mi vida”.

Y Kaity se enorgullece de formar parte de la vida de ellos. “Uno puede tener un gran impacto en alguien si se toma el tiempo de conocerle, y WellMed nos permite disponer de ese tiempo. Nos encanta que el modelo de atención y los valores de WellMed coincidan con los nuestros”, afirma.

Kaity también aprecia los servicios adicionales que WellMed ofrece a sus pacientes. El hecho de contar con auxiliares de enfermería, transporte, trabajadores sociales, comidas en situaciones extremas, dice, es lo que hace a WellMed tan diferente. Si los pacientes no tienen acceso a las comidas adecuadas, por ejemplo, su salud se verá afectada, o si no cuentan con los servicios adecuados para ellos, su grado de estrés les afectará. “WellMed trata de resolver eso”, afirmó.

Sandra Sánchez, la asistente médica de Kaity les dirá que Kaity trata de resolver eso. “Se desvive por encontrar recursos dentro de la comunidad para ayudar a los pacientes, ya sea con sus facturas, la vivienda o la comida”, dijo Sandra.

Kaity también habla con gran orgullo del ambiente de la clínica y el personal de la clínica. “Contamos con el mayor nivel de retención de empleados de todas las clínicas de WellMed. Elvia Miranda, nuestra asistente médica, ha trabajado en la clínica durante 15 años. Ella estuvo conmigo durante cinco años y había estado antes con mi abuelo”, añadió. “La asistente médica de mi padre trabajó con él durante 19 años. Cuando uno empieza a trabajar aquí, lo adoptan como parte de la familia. Es la cultura que hemos creado”, afirmó.

Elvia les puede decir que Kaity contribuye en gran medida a crear esa cultura. “Hace que todos sientan que son tratados por igual y que son importantes”, dijo Elvia. “En la clínica todos son bienvenidos y valorados. Ella predica con el ejemplo y está dispuesta a hacer cualquier trabajo, incluso si está por debajo de su descripción de trabajo”.

Nos quitamos el sombrero ante Kaity y ante todos nuestros maravillosos asociados médicos (PA, por sus siglas en inglés), a quienes les rendimos homenaje oficialmente esta semana, y todas las semanas del año.